TODOS LOS MODELOS DOXA SON SWISS MADE

La etiqueta Swiss Made encarna un concepto de calidad y fiabilidad que se ha forjado a lo largo de los años. Hoy en día, sigue siendo la única referencia verdadera y la mejor garantía de satisfacción del cliente en el mundo de la relojería. 

La etiqueta Swiss Made va más allá del valor intrínseco de un reloj y abarca también criterios definidos por la ley, incluidos, entre otros, la calidad técnica de los relojes (precisión, fiabilidad, hermeticidad y resistencia a los golpes), así como su calidad estética (elegancia y originalidad del diseño). 

  Montados íntegramente a mano en el corazón de Suiza, todos los relojes DOXA cumplen estos requisitos y, en muchos casos, incluso los superan. 

“«En todo el mundo, la reputación de los relojes Swiss Made no tiene rival. Saber hacer, calidad impecable, destreza estética, innovación técnica: la indicación Swiss Made refleja todo esto y mucho más. Dos palabras que, combinadas con marcas de renombre, garantizan la mejor elección para el consumidor que busca un reloj de gran valor».”